La Corte Suprema decidió con los votos de los jueces conservadores que no existe el derecho constitucional al aborto, dejando la decisión de permitir o no la interrupción del embarazo a los estados.
Jubilosos activistas contra el aborto han logrado algo que parecía prácticamente imposible hace apenas unos años. Creen que ahora se salvarán las vidas de miles de bebés.